domingo, 12 de enero de 2014

La Inmigración

Opinar sobre la inmigración, para mí, es un tema que me resulta complicado, porque tiene dos versiones o partes diferentes: la versión o parte del inmigrante y la versión o parte del que la recibe. A la vez, la versión o parte del que recibe la inmigración, puede tener dos puntos de vista, los que lo ven como una cosa mala (que suelen ser los racistas) y los que lo ven bien y no les importa (los que no son racistas).
Yo, empezaría por la versión de los inmigrantes. Estos emigran de su país por falta de trabajo, dinero o para tener una vida mejor. Al llegar al otro país intentan de buscar trabajo, vivienda, amigos... En un país como España, los inmigrantes están protegidos, por lo tanto intentan darles trabajo, una vivienda en condiciones, ayudarlos con el banco de alimentos (si la situación es más grave)... Hay algunos inmigrantes que agradecen y aprovechan todo lo que se hace por ellos, y llegan a vivir un poco mejor que en su país. Pero por otra parte, hay inmigrantes que se aprovechan de estos beneficios que les ofrece el Estado: al estar más protegidos, que incluso un español natal, no pagan apenas impuestos, se aprovechan de la alimentación que les dan gratis, hacen lo que le da la gana sin tener problemas; si tienen un problema en la justicia (con un español) casi siempre salen ganando ellos...
Por todo esto, los que reciben la inmigración, tienen esos dos puntos de vista. Voy a hablar primero de los que ven la inmigración como una cosa mala o muy mala, ya que lo encadenará con lo otro. Las personas que ven que la inmigración está mal, suelen ser racistas, y para verlo de esta forma (a parte de su racismo) se apoyan en los inmigrantes que se aprovechan de los beneficios, y se creen que todos son iguales y por eso no les dan ninguna oportunidad. Estas personas, también piensan que los inmigrantes vienen a su país a quitarles el trabajo (mientras que vienen a hacer el trabajo sucio o que nosotros no queremos), el dinero; y los obligan a que descarten sus costumbres y tomen las suyas y sino son marginados, amenazados o incluso maltratados. Detrás de todo esto, se encuentran las personas que ven que la inmigración está bien y de hecho los protegen. No creen que les vengan a quitar nada y que mucho menos les tengan que quitar ellos sus costumbres. Estas personas, para pensar así, se apoyan en los inmigrantes que agradecen lo que se hace por ellos y también, por si algún día ellos mismos tuvieran que emigrar cómo les gustaría que les tratasen. Esto último que he dicho, me parece genial, porque si nos imaginamos que nosotros tuviéramos que emigrar de nuestro país para ir a otro, ¿cómo nos gustaría que nos acogieran y nos tratasen? Bueno, me imagino cual sería la respuesta.
Para terminar, una pequeña opinión personal. No hay que ser racistas, hay que darles una oportunidad siempre a los inmigrantes (ellos sabrán lo que hacen con ella) y si se aprovechan de esta, no hay por qué protegerlos tanto, ya que si no se seguirán aprovechando de los beneficios y de nosotros. Y lo más importante, preguntarnos esa pregunta que he realizado antes: ¿Cómo nos gustaría que nos acogieran y nos tratasen a nosotros en un país extranjero?

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